Cumbia del Suricato

¡Este es mi sov!



¡Este es mi sov! ¡este es mi sov!



Te esperé...

Te esperé... Te esperé...

Te esperé...



¡Este es mi sovvvv!



Te esperé como un suricato,

A solas con la luna y con el sol doce horas después,

Ya no queda ni el olor, sudor y roce de tu piel,

Hasta mi almohada ya no quiere nada,

Mi almohada ya no quiere nada,

Mi almohada ya no quiere nada solo tu querer.



La otra noche te esperé aunque no bajo la lluvia,

Pero si mas de mil horas,

Como esperan buenos hijos todas las señoras,

Te espere como el preso espera salir de prisión,

Como el condenado a muerte espera por su inyección,

Como los brasileños esperan el carnaval,

Como las reinas de belleza esperan la paz mundial,

Te espere como un alcalde espera su reelección,

Con la fuerza que un anciano espera una erección.



Suricato ya no quiere comer, suricato ya no quiere vivir,

Suricato ya se quiere morir, suricato se empieza a despedir...



Suricato ya no quiere comer, suricato ya no quiere vivir,

Suricato se empieza a despedir, suricato ya se quiere morir.



Te esperé como un suricato,

A solas con la luna y con el sol doce horas después,

Ya no queda ni el olor, sudor y roce de tu piel,

Hasta mi almohada ya no quiere nada,

Mi almohada ya no quiere nada,

Mi almohada ya no quiere nada solo tu querer.



Te espere como espera a su presa el lince,

Como una niña espera por su fiesta de quince,

Como la embarazada espera por dar a luz,

Como miles de cristianos el regreso de jesús,

Como el pobre espera para ver que cambia en su entorno,

Como espera la noche el joven para ir a ver porno,

Te esperé, te espero y te esperaría aún mas,

Estilo hacia la loca en el muelle de san blas.



Suricato ya no quiere comer, suricato ya no quiere vivir,

Suricato ya se quiere morir, suricato se empieza a despedir...



Suricato ya no quiere comer, suricato ya no quiere vivir,

Suricato se empieza a despedir, suricato ya se quiere morir.



¡Este es mi sov!



¡Este es mi sovvvv!



Te esperé como un suricato,

A solas con la luna y con el sol doce horas después,

Ya no queda ni el olor, sudor y roce de tu piel,

Hasta mi almohada ya no quiere nada,

Mi almohada ya no quiere nada,

Mi almohada ya no quiere nada solo tu querer.