Lentamente han caído, han caído
Las prendas para recibir, para recibir
Estas partículas de amor, del corazón
Hechas beso, hechas beso
Con tu boca danzante, que me inunda
Junto a tu oído, junto a tu oído
Recito poesía, murmuro poesía
Manos que son de hielo se tornan en fuego
Manos hechas barco zarparon de mi puerto
Para navegar en ti amor
Y este es el poema, el poema de una noche
Y estas son las crónicas de las batallas de nuestra pasión
Crónicas que estas plasmadas en la cama
Y yo escojo las letras, y tu cuerpo es la inspiración
Esos dóciles pechos, dóciles pechos
Que colman mis ansias, colman mis ansias
Y de ellos pruebo, una dosis inevitable de frenesí
Una dosis inevitable de ti
Y este es el poema, el poema de una noche
Y estas son las crónicas de las batallas de nuestra pasión
Crónicas que estas plasmadas en la cama
Y yo escojo las letras y tu cuerpo es la inspiración
Y saboreo el néctar, fruto bendito que ha nacido
Al irrumpir mi lengua en tu sexo húmedo
En tu sexo, en tu sexo húmedo!
Y este es el poema, el poema de una noche
Y estas son las crónicas de las batallas de nuestra pasión
Crónicas que estas plasmadas en la cama
Y yo escojo las letras y tu cuerpo es la inspiración
Momentos después, minutos después
Hay una implosión, el universo colapsa
En orgasmo sincronizado, y hay risas de complicidad
Y mi anhelo
es verte una vez más